En el análisis que hacemos en este blog recordemos que se incluyen las alertas por presencia de ingredientes, sustancias o productos que quedan en el producto final y que pueden provocar alergias o intolerancias en algunas personas.
No hay que olvidar la diferencia entre alergia (reacción del sistema inmune de nuestro cuerpo que reconoce como algo dañino el alimento que estamos consumiendo) e intolerancia (alteración digestiva que provoca algunos alimentos en determinados tipos de personas).
Los 14 alérgenos obligatorios en la Unión europea a declarar en el etiquetado son:
- Cereales con gluten.
- Crustáceos.
- Moluscos.
- Pescado.
- Huevos.
- Altramuces.
- Mostaza,
- Cacahuetes.
- Frutos de cáscara.
- Soja.
- Sésamo.
- Apio.
- Leche y productos lácteos (incluida la lactosa).
- Dióxido de azufre/sulfitos (en concentración >10 mg/kg o mg/l)
En los últimos años las más conocidas intolerancias, por su detección en el sector sanitario, y por el esfuerzo de las industrias alimentarias en eliminarlo de la composición de muchos productos, son las intolerancias al “gluten” y a la “lactosa”.
Es de resaltar que las alertas que se mencionan en este artículo corresponden a problemas que han tenido las empresas alimentarias, por no detallar en su etiquetado que contienen dicho alérgeno, lo que además de un incumplimiento de etiquetado, supone un potencial riesgo para las personas alérgicas o intolerantes a la sustancia no declarada.
En 2022 se publicaron 32 alertas.
En el 2023 se han publicado 21 alertas, por lo que vemos que se han reducido respecto al 2022.
A continuación, haremos el análisis de las alertas de alérgenos de 2023 desde distintos puntos de vista.
ORIGEN DE LAS ALERTAS
Aunque en ocasiones llegan alertas notificadas por otros estados miembros de la Unión Europea a través del RASFF (Sistema rápido de alerta europeo de alimentos y piensos), o se declaran alertas de productos en España con origen en Europa o terceros países, como podemos ver en la gráfica adjunta, la mayoría proceden de España (72%), seguidos de países de la Unión Europea con un 14% (Eslovenia, Polonia, Reino Unido) y otros países con un 14% (Turquía, Colombia).
NOTIFICACIONES DE LAS ALERTAS
Las alertas han sido notificadas por una de estas dos vías:
- Sistema Coordinado de Intercambio Rápido de Información (SCIRI) usado por las CCAA (Comunidades Autónomas).
- Red de Alerta Alimentaria Europea (RASFF) usado por los países miembros de la Unión Europea para dirigirse a las autoridades sanitarias españolas.
Las notificaciones que han llegado desde España (SCIRI) han sido el 95% de las alertas por alérgenos, mientras que el 5% han llegado a través del RASFF.
La única notificación europea ha procedido de Eslovenia.
En España por CCAA, las más activas han sido en este orden: Madrid, Valencia y Cataluña.
ÉPOCA DE LAS ALERTAS
Analizando la época de las alertas, no se ve una relación estacional. Los meses más activos han sido agosto y octubre con 4 alertas declaradas; seguidos de marzo y abril con 3; mayo y septiembre con 2; y en último lugar febrero, noviembre y diciembre con 1 alerta en cada uno de estos meses.
PRODUCTOS AFECTADOS
Destacan entre los productos con más alertas declaradas los dulces/postres/caramelos (38%), seguidos de las legumbres/semillas, vegetales (33%), y en tercer lugar las bebidas vegetales (10%).
A diferencia del 2022, no se han producido alertas por alérgenos en productos cárnicos.
El resto de productos afectados puntualmente han sido: azúcares/edulcorantes, snacks, complementos alimenticios, helados, caldos.
ALÉRGENOS EN 2023
Aunque hemos tenido 21 alertas notificadas en 2023, sin embargo, se han detectado 26 alérgenos en dichas notificaciones, porque en ocasiones en un mismo tipo de producto han aparecido más de un alérgeno no declarado.
Como novedad este año, se han considerado alerta no sólo la presencia de trazas de alérgenos no declarados en etiquetas, sino también se han declarado en 3 ocasiones alertas por alérgenos a productos no etiquetados en español.
Como podemos ver en la gráfica adjunta, la presencia de lactosa/leche/proteínas de la leche ocupa la primera posición con un 35 % de incidencias por no declararlo en etiquetado, seguido del gluten (23 %), mostaza (12%), los frutos de cáscara (avellanas y almendras) y soja con un 8%, y por último cacahuete, crustáceos, apio y huevo con un 4%.
Por lo que finalizamos este blog, recordando a los responsables de calidad y seguridad alimentaria de las empresas alimentarias la importancia de una adecuada gestión de control y homologación de materias primas y proveedores, así como la gestión de los procesos en planta para evitar las contaminaciones cruzadas, y en caso necesario hacer uso del “etiquetado precautorio” de los alimentos, para evitar vernos incluidos en una alerta alimentaria, con la repercusión negativa de imagen de la empresa que siempre conlleva.
IRISTRACE es un software que te va a permitir llevar los controles de alérgenos en planta y justificar dichos registros totalmente de forma digital, sin el uso de papeles, ni retrabajos que no aportan valor al departamento de calidad y supone un tiempo perdido que se puede dedicar a otras tareas del departamento.
Si quieres ver la publicación del análisis de alertas anteriores pulsa en los siguientes links: